Y se plantó un Pino en Alicante

Aunque bien pudo quedarse en su puñetera casa, el Pino que "malpitó" a los nuestros en el Rico Pérez, y que condicionó sobremanera, el resultado final del partido. Y no vamos a criticar la gran labor de todos nuestros jugadores ante el líder de la categoría, eso no seremos nosotros pese a que en un diario digital lo insinúen, y sí una gran parte del cordobesismo en sus foros, que en esta ocasión crucifican a Fuentes, y a Aguilar, por lo que llaman errores individuales. El único error que se cometió ayer, fué dejar pitar a un Pino que no merece "malarbitrar" en esta categoría. Un auténtico inútil, siendo el significado de inútil según la RAE lo que no sirve o no se puede aprovechar en alguna línea. En este Pino no hay "madera" de árbitro, y si un claro afán de protagonismo que ya preveían incluso los comentaristas de MARCA TV, que apostaban a que el  número de tarjetas amarillas superaría con creces las 10, como así fué.

El problema viene cuando no trata por igual a ambos equipos, y no mide bajo el mismo rasero a todos los jugadores, como así hizo. Nos imaginamos que ambos equipos eran conscientes del colegiado que sufrirían, pero en ese caso, los errores los cometieron los jugadores por ambos bandos. Y si no que se lo pregunten a Samuel y la patada en el pecho que le dió a Patiño para la que el árbitro no fué de tarjeta, pero sí lo fué un minuto más tarde un simple agarrón en mitad del campo, del que cada partido se pueden realizar mil. Muchos exculpan al defensa herculino, porque "le dió sin querer". También sin querer fué la patada de Pepe a Alves en las semis de la champions, y el árbitro no dudó en señalarle la merecida tarjeta, aunque se equivocara de color. No cabe duda que este árbitro es de los que quiere salir en los medios de comunicación, porque como dice el dicho eso es el marketing, que hablen mal o bien de uno, pero que hablen. Este árbitro no pasa desapercibido muy a nuestro pesar.

Y de un control absoluto de juego aunque sin mucha profundidad en el campo del líder, a tener que poner a ¿¡¡¡Hervás!!!? de lateral, y tener que meter un doble pivote ultradefensivo. Muchos achacan el posterior fallo de Alberto Aguilar en el gol, pero la realidad es que si no nos hubieran expulsado a Fuentes, probablemente Aguilar no hubiera salido. Por tanto aún con más razón la culpa de la derrota, pese a que Jémez le quite hierro al asunto, fué de un arbitraje malo y parcial.

Por otra parte, la gente se pregunta ¿Porqué mantiene el castigo al portero Carlos Arias el mister? Ayer se demostró que cuando Alberto García debería salir no sale, por ejemplo en el gol, y que los remates en el área pequeña fruto de sus indecisiones, están a la orden del día, y eso el entrenador, no lo puede ocultar. Eso es algo que Alberto, debe seguir trabajando, y dar paso a un compañero, que estaba bastante más enrachado que él. Lo mismo que alabamos sus virtudes en el uno contra uno, en el que probablemente sea de los mejores de la categoría, vemos deficiencias en otros aspectos que nos cuestan puntos, y eso es algo objetivo.

Si bien es cierto que el Córdoba ha perdido, ojo, con Valladolid, Hércules y Deportivo de La Coruña, con los dos primeros se puede aseverar que no han demostrado ser superiores a nuestro equipo. En cualquier caso, ¿Alguién hubiera dudado a principios de temporada que no perdíamos con los anteriores?. Y más si vemos el presupuesto de unos y del otro. Por tanto sacar 3 puntos de la visita a Alicante, se puede considerar como un buen bagaje, siempre y cuando se gane contra el Barça B, sino el equipo será como el buen padre, que se deja en casa lo que gana fuera.

Al margen de lo que el equipo muestra en conjunto, de una manera generalizada, si analizamos línea por línea, hombre por hombre, está bien claro que hay jugadores que no cuentan para Jémez, como el internacional sub19 con Portugal Taira y Balsas, y que unidos a los lesionados de larga duración Astrain y Cristian García, hacen del Córdoba una plantilla muy corta, y cuyos números arriba, arrojando los pocos goles que marca, necesitaría de algún refuerzo también en la vanguardia. Es decir, lateral, y delantero para el mercado invernal como mínimo, y eso Jémez lo debe demandar a quién corresponde, que es el Sr. González. Si con Charles (estando mal como está) el Córdoba no marca, ayer sin su concurso, era materialmente imposible de todas todas y con un 4-2-3-1, marcar algún gol a todo un porterazo como Falcón, y a Paco no le quedó más remedio que un invento que en lo defensivo le salió bien, pero que supuso en ataque apenas dos tiros a puerta y de balón parado y eso es un bagaje ofensivo deprimente, sobre todo si esto nos ocurre en casa.

El próximo fin de semana contra el Barça B, el campo se llenará de catalinos, de peñistas cordobeses que son antes de un equipo de arriba antes del de su tierra. Allá ellos, el año pasado al menos se dejaron un buen dinero en taquilla, y se fueron "calentitos". Pero eso sí nos la devolvieron con creces allí en el Mini Estadi. Esperemos que los nuestros lo recuerden, y les den su merecido y nos enganchemos con la zona alta, porque es donde actualmente merecemos estar. A llenar el estadio, pero de cordobesistas, y que no nos planten un caganet los del Barça B, o lo que es lo mismo otro Pino.