La 90 y su Antivirus 2011

Comenzamos el año nuevo, con la 90 (NO-VENTA) y como siempre trás las uvas, enfermos, gripados, con mala suerte, y con mejor juego pero con idénticos resultados a lo ya habitual fuera de casa. Ni marcamos tras numerosas ocasiones y nos marcan muy fácil, el club no se vende, no llegan refuerzos, y el entrenador y los jugadores son los que hay y no cobran. El Córdoba es como un ordenador hecho de componentes de calidad pero de segunda mano, pasados de vueltas, con mimbres suficientes para un óptimo rendimiento en su entorno, pero con un procesador incapaz, maniático, caótico que a duras penas hace que funcione, cuando antes con menos recursos iba bastante mejor. Y todo esto dá al cordobesismo que pensar. ¿Qué diferencias existen entre esta temporada y la anterior si la base es la misma? Pasamos a enumerarlas.

1.- La crisis. El año pasado la crisis no había llegado a las arcas cordobesistas y durante casi toda la temporada, se estuvo al día en el pago de las nóminas de los jugadores. Este año NO. Bien es cierto que eso puede desmotivar, pero recordemos a un valeroso grupo de cordobesistas a los que además de cobrar menos que la plantilla actual, se les adeudaba bastante y con una demora superior a la actual, y que de la mano de Escalante como entrenador y Manuel Oviedo como presidente ascendieron al equipo en el 99. La actitud del actual equipo lo dice todo y dese luego no parece que tengan las más mínimas ganas de salir de la mediocridad.

2.- El mister. A nadie se le escapa, que Alcaraz intentó jugar al fútbol, pero no supo nadar y guardar la ropa en los primeros partidos de liga contra Rayo y Celta, no supo matar partidos que estaban ganados, y volvió a lo que conoce, al juego rácano y pobre que le caracteriza (aunque él diga que no), que de ese juego si entiende. El problema viene cuando a jugadores de gran calidad, los matas a defender. Los laterales no suben en partido alguno, se empeña en poner a jugadores bajos de forma como Pepe Díaz, o totalmente inútiles en determinados lugares como Flores y remata las convocatorias proponiéndose fielmente a sí mismo, cual va a ser el siguiente jugador más en forma de la plantilla en pisar la grada, como Agus o Charles. Desde Huelva ya lo decían, Alcaraz acaba con la paciencia de cualquier afición, y la nuestra después de 40 años sin pisar primera, ya está más que harta de aguantar cabezonerías, mediocridad, negativismo, baja autoestima, autocomplacencia, y ataques de entrenador, de un Alcaraz que está de los primeros en el ranking de entrenadores mejor pagados de segunda, y que dichos emolumentos contrastan con la 15º posición que ocupa el CCF. Se puede decir que el ratio posicion del equipo/dinero gastado en entrenador es el más bajo de toda la segunda división.

3.- Los virus. Es vox populi entre los comentarios de los aficionados por la calle y en los foros de opinión, que en el vestuario hay agentes contaminantes altamente tóxicos, que en estos últimos años se habían difuminado, pero que han vuelto con inusitada virulencia. No faltan seguidores albaceteños estos días que nos den un toque de atención respecto a gente como Alberto Aguilar y Juanmi Callejón (el de las salidas nocturnas), como presuntos precursores de "motines a bordo del queso mecánico" que curiosamente todavía repican con otros protagonistas por aquí. Aquí todavía tenemos reductos de la "rebelión contra Escalante" con gente como Arteaga y Javi Flores. También cuesta creer que algún cordobesista escuche a un Gaspar (que lleva la tira sin jugar) presuntamente comentar en algún café que "si los jugadores quieren pueden echar al Alcaraz ya". Sin olvidarnos de que tenemos presuntamente al PORTERO MÁS SOSPECHOSO de toda la liga adelante. Toda esta trama (si es que existía) desde luego no era tan beligerante el año pasado, pese a que tuviéramos a un Ceballos también en el ojo del huracán. Son numerosos los nombres que salen en este tercer apartado, y por lo que parece nada que ver con los Loreto, Clavero, Espejo, Rafa Navarro, Ramos, Oscar Ventaja etc.

4.- La NO-VENTA. Que duda cabe, que si en tu empleo tus futuros jefes dicen en público que van a traer a otros que ocuparán tu puesto, la inquietud debe de ser mayúscula, y más en un equipo donde no hay ningún titular indiscutible gracias al entrenador. El problema viene cuando los futuros jefes, ven lo que hay (los 3 puntos anteriores) y se lo empiezan a pensar. Entonces es cuando se termina de arreglar el desaguisado. Es lamentable tener por presidente y directiva a una auténtica pandilla de inútiles y miserables que no merecen seguir en sus respectivos puestos porque ellos mismos son las primeras fuentes de mediocridad en el club, por como están gestionando todo esto de la 90 (NO-VENTA) del club. Por suerte lo más grande del club seguirá siendo su afición, a esa que estos mismos incompetentes insultan vilmente con cada intervención.

Cambiando el tercio y ahora hablando del partido. Viendo los resúmenes y lo escuchado por la radio, que reflejan que el Córdoba salió ante un equipo que tiene como titulares a Verza y Asen (con eso ya lo decimos todo), a verlas venir, temerosos, dubitativos, con pánico, ante un rival en descenso, sin olvidar que dejar en el banquillo a Charles, y a Agus en la grada, es señal de echarse a temblar con razón, significa "palmar" de antemano. Y en eso es experto Alcaraz fuera de casa. En catalogar al rival de imposible para los nuestros, en meterle miedo a sus jugadores, en achacárselo todo a la mala suerte o en ocasiones a los arbitrajes, o en excusarse con partidos muy seguidos, o en horarios intempestivos que ambos equipos sufren. Pero en el tema psicológico por suerte teníamos ayuda de las "amigas psicólogas". Esas que son capaces de hacer creer a los nuestros que la permanencia es posible, todo un logro. No hablemos mejor de los ratios de euros malgastados en el club, que luego a más de uno le dá el avenate de no ir a apoyar a los nuestros en Liga o Copa del Rey mientras llueve a cántaros y sabiendo el paupérrimo juego que desarrolla el equipo actualmente, y aquí todo el que sea cordobesista y desee mantener el status de estos innombrables debe pasar por caja cuanto más mejor y de una manera irracional, porque debemos confiar ciegamente en los gestores que han coseguido el logro de la permanencia y lo pueden volver a lograr.

Pues ahora sí que para Los Reyes Magos, o para el sorteo del niño, al Córdoba que le caiga un inversor de una vez por todas sin más demora, valiente, honrado, que haga una limpieza general que es necesaria, y que se llame Gaucci, Vico, De Aldama o Mohammed I y Secamed Despues nos dará igual a la afición, mientras venga con un buen Antivirus bajo el brazo.