7 de marzo de 2011

Vuelta a la mediocridad

Ciclicamente en Córdoba, no nos podemos permitir el lujo de ilusionarnos con aspirar a algo que no sea una permanencia barata y mediocre a parte iguales como en temporadas pasadas. La diferencia ahora estriba en que Alcaraz (aunque no le paguen al día) gana mucho más que los Jémez y Eslava.

Y es que la ineptitud de nuestros mandatarios focalizados en un miserable, no tienen otra cosa mejor que hacer, que no solo darle tranquilidad al entrenador de que su renovación no corre peligro y que cuentan con él, sino que cometen la desfachatez de nombrarlo "director deportivo" mientras no ocurra nada extradeportivo. Eso es darle la excusa perfecta al de Granada. Y ya nos imaginamos que querrá fichar a jugadores prohibitivos, a lo que el consejo le dirá que no puede ser, y por tanto ya podría corroborar su discurso rancio de la permanencia con la plantilla que le han dejado hacer, sus excusas baratas como que juega partidos muy seguidos y tiene poca plantilla o vete tu a saber que se inventa. Si algo tiene de bueno el nombramiento, aparte del discutible ahorro, es que si el próximo año la cosa no funciona, ya no le podremos echar la culpa a Zubillaga. Pero en ese caso ya sería demasiado tarde.

En cualquier caso parece que los jugadores se han contagiado de esa tranquilidad que recuerda al mes de Mayo del año pasado. Curioso que se le dé tranquilidad a Lucas por parte de la directiva, y el equipo juegue dos de los peores partidos de toda la temporada, con una goleada incluida por parte de un filial de manera bochornosa . El caso es que tenemos el convencimiento que es Alcaraz el que le "pone freno" (como antena3) al equipo para poder justificar su discurso pesimista, o que los jugadores no han tomado de buen grado la decisión de tener que aguantar las cabezonerías del mister más tiempo, aunque esta última vertiente de opinión es más remota. Lo que si le daremos un dato objetivo a Alcaraz, el 15º no es un puesto que mejore el 10º puesto del año pasado, por tanto este año no mejora el anterior y sin embargo la plantilla es bastante superior a la del año pasado, y más aún cuando vuelva Gaspar a estar a un nivel óptimo.Por tanto no se cumple el objetivo institucional que era "mejorar la posición del año pasado", y por supuesto ni por asomo llega al objetivo real que es según Salinas y las estimaciones de taquillas en los presupuestos del club, "jugar los dos partidos del playoff". Que tomen nota los directivos, pues a entrenadores que si sacaron rendimiento se les echó sin temblar mucho el pulso, como a Escalante y Pepe Murcia.

Analizando los dos partidos jugados por nuestro equipo, diremos que o bien los jugadores no tienen ilusión porque no cobran al día, o bien son unos mediocres conformistas que no desean mejorar en la vida, o por el contrario su juego viene definido por oscuros fines de mal recuerdo para el cordobesismo que atenderían a actitudes extradeportivas que ya salpicaron en su día a Ceballos en España y a Pierini en Italia. Otra explicación no tiene. Que seamos capaces de marcarle 2 goles al filial del Barça en Córdoba, y que este sea capaz de meternos 4 qeu pudieron ser 8 pefectamente según los comentarios, es cuando menos muy sospechoso de que alguna de las tres razones se están dando. El filial es un equipo con 3 o 4 grandes jugadores, pero su clasificación indica que no son nada de otro mundo. En Vallecas y en Vigo no salimos victoriosos por malos arbitrajes y mala suerte respectivamente pero hicimos un papel notable en cualquier caso. Y esos equipos son lo que actualmente mandan en la clasificación, eso huele muy raro también. A gente como Richy acostumbrado a dar un patadón cada dos por tres sin sentido, y de dividir la pelota jugada suya sí y jugada suya también, radicalmente le dá un ataque de Beckenbauer e intenta sacar la bola controlada sin tener ni puñetera idea de como. Dió varios pases flojos de 2 metros hacia algún compañerode espaldas, en uno de los cuales nos marcaron el tercero que sería la sentencia. En general allí todo el equipo estuvo desdibujado. Pero es que ayer ante Numancia todo parecía ir a cámara lenta. Sobre todo la presión de gente como Oriol, o los marcajes de Tena o el propio Richy en las únicas jugadas de balón parado que nos costaron el gol. No fué el día de Callejón ni de Arteaga, muy flojitos al igual que Luque y Aguilar. Un poco más entonado estuvo Camille y el mejor fué sin duda una vez más Charles, que fué el alma y el gol del equipo. Único que pareció tomarse el partido algo en serio. Hasta una herida le hicieron en un claro penalty no señalado por el nefasto árbitro, fruto de la insistencia por llegar a todos los balones del brasileño. Y mejor no hablar de arbitrajes, porque el segundo gol del Numancia es un claro fuera de juego no señalado.

Otro que no está para jugar y juega al igual que Richy es Pepe Díaz cuyo concurso ayer fué ridículo. El problema es que no hay más gente, pero no ha funcionado mal del todo colocar a Sesma por detrás del delantero. Pero al canario Alcaraz lo pone porque no le queda más remedio, por desgracia para el equipo. Estas filias y fobias las seguimos denunciando porque va en detrimento del juego y de la clasificación del equipo. La actitud de Richy y su paupérrimo juego ayer, hizo recordar no solo a Agus que sigue defenestrado sino que la gente ya quiere acelerar la entrada de el mariscal Gaspar en la titularidad de la zaga blanquiverde. Y luego el gallego viene "amenazando" con irse al Deportivo de La Coruña o ser repescado por el Celta de Vigo. El caso es que en La Coruña parece que lo esperan con los brazos abiertos, e incluso le han dedicado una estrella de crack en la calle Manuel Murguía en los aledaños del estadio de Riazor.
Dedicado a Richy por sus famosos "cantes"
Luego dicen que el equipo no engancha. Si cuando mejor lo tiene el equipo para animar a la afición, se suceden estos partidos que hacen dudar al más optimista del devenir del equipo en la liga, es casi imposible que se consiga llevar a más de 9000 personas al estadio, por mucho que se empeñen en el área de marketing, o Salinas. BAJAD LAS ENTRADAS DE UNA VEZ. Aunque la verdad, lo que hay no motiva, y si no motiva, no merece la pena verlo. Como la gente que viene de los pueblos de la provincia incluso con mal tiempo, para ver "lo de siempre". Esta vez le tocó el turno a los chavales de Montilla, buena medida por parte de Juan Torres en la diputación, pero objetivamente totalmente contraproducente, ¿Acaso algún chaval motillano se sintió identificado con un equipo derrotado desde el primer minuto? ¿Creen los directivos que este equipo y este entrenador-director es capaz de enganchar a algún chaval de la provincia?. Nos tememos que NO.

En manos de los jugadores y entrenador está intentar volver a ilusionar a la afición, aunque esto ya empieza a apestar a un nuevo "PERMANENTISMO MEDIOCRE". Y aún más si cabe con las dificiles salidas seguidas que tenemos.

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